Foro
por el 78 aniversario de la normal rural de Ayotzinapa
El
gobierno promueve la educación privada
y ataca la pública, advierten
Los
planteles de paga crecen “sin sustento académico”,
cuestiona Erika Zamora. Proponen que se promueva la enseñanza
del náhuatl, mixteco, tlapaneco y amuzgo
Ex
presos políticos y egresados de la Normal Rural de Ayotzinapa
Isidro Burgos, cuestionaron la política del gobierno federal en
favor de la apertura y crecimiento de planteles de educación
privada, para responder a los programas de organismos
financieros internacionales como el Banco Mundial. También
exigieron que la SEG promueva la enseñanza de las cuatro
lenguas indígenas –amuzgo, mixteco, náhuatl y tlapaneco–,
además del castellano.
Cerca
de las 11 de la mañana y ante unos 100 estudiantes de la Normal
Rural de Ayotzinapa, así como integrantes de organizaciones
sociales, el jueves el egresado de esa normal, ahora maestro de
primaria en Cuetzala del Progreso, Esteban Godínez Flores,
expuso en el foro Educación superior, su crisis y perspectivas,
que el objetivo de las normales rurales es “atender la educación
de los campesinos”.
Dijo
que con las normales rurales se busca que los hijos de los
campesinos estuvieran concientes y fueran capaces de transformar
“nuestra población rural” y tan sólo de 1930 a 1940 se
crearon 27 normales rurales; 16 de las cuales desaparecieron en
1968 con Gustavo Díaz Ordaz.
Uno
de los grandes problemas de las normales rurales, dijo Godínez
Flores, es que actualmente sus egresados “pierden su identidad
y ya no quieren regresar a las comunidades a impartir clases, a
muchos les da pena su origen”.
Asimismo
destacó que hoy la Secretaría de Educación en Guerrero está
creando normales privadas “al vapor”, con miras a privatizar
la educación superior. Además consideró que “es falso que
las normales rurales hayan cumplido con su papel, y la vida de
estas escuela depende de sus estudiantes”.
En
su intervención, la ex presa política Erika Zamora Pardo
–detenida el 7 de junio en la comunidad de El Charco de Ayutla
de los Libres, acusada de pertenecer al ERPI– expuso que
actualmente las políticas educativas responden a las políticas
del Banco Mundial (BM) en favor del mercado, una de las cuales
es otorgar “incentivos a las instituciones públicas para que
diversifiquen sus fuentes de financiamiento”, entre ellas
establecer cuotas y aranceles.
Zamora
Pardo afirmó que a la fecha las instituciones privadas continúan
creciendo, pero “con poco sustento académico”, en este
sentido dijo que existe una discusión sobre seguir las políticas
de organismos financieros internacionales en materia de educación,
los cuales “argumentan que la educación superior debe ser
privatizada para ser de buena calidad”.
Zamora
Pardo insistió en que la política neoliberal del gobierno
federal no considera “el impulso de las normales rurales, sino
que ha desatado una embestida contra ellas en los medios
de comunicación y en la sociedad para impulsar su
desaparición, y así quitarse el obstáculo que no le permite
implantar su proyecto privatizador”.
El
también ex preso político, Efrén Cortés Chávez –detenido
en el mismo lugar que Erika Zamora– comentó que las normales
rurales enfrentan grandes problemas que tienen que ver con la
existencia de una planta docente “acrítica y que se acomoda a
las políticas oficiales”.
Cortés
Chávez mencionó que también las normales rurales enfrentan un
problema pluriétnico y propuso que tengan como una materia la
enseñanza de las cuatro lenguas que se hablan en la entidad
además del castellano: el náhuatl, mixteco, tlapaneco y
amuzgo.
Luego
expresó el ex preso político que el nuevo plan educativo debe
“contraponer el problema de la pedagogía y de vocación para
impulsar la educación popular, ya que estamos en un proceso de
deseducación”.
Después
de ser presentadas las ponencias, algunos estudiantes de la
normal rural de Ayotzinapa hicieron algunas aportaciones, entre
ellas una crítica al Plan Educativo de 1997, el cual “nos
obliga a recibir la enseñanza dentro de las aulas, sin embargo
la tarea de un maestro no se centra en la aulas, sino a
transformar a la sociedad”.
Más
adelante y tras las participaciones tanto de los ponentes como
de algunos alumnos asistentes al foro por el 78 aniversario de
fundación de la escuela, se propuso exigir a la Secretaría de
Educación en Guerrero la enseñanza de las cinco lenguas que se
hablan en el estado de Guerrero: el amuzgo, náhuatl, mixteco,
tlapaneco y castellano, para “no tener cualquier docente” en
las comunidades rurales.
También
acordaron buscar una relación con la Universidad Autónoma de
Chapingo, para reactivar la producción de conocimientos en la
normal rural. Asimismo pidieron publicar el transfondo político
del Plan Educativo de 1997 a través de distintos medios y
finalmente propusieron que las prácticas de los docentes se
deben llevar a cabo en en el medio rural.
Al
foro asistieron la Asociación de Familiares de Detenidos
Desaparecidos y Víctimas de Violaciones a los Derechos Humanos
(Afadem), el Frente de Organizaciones Democráticas de Guerrero,
así como normalistas de Teteles Puebla.
Más
tarde el vocero de la normal Rural de Ayotzinapa, Francisco
Aguilar, denunció que de los fondos entregados por el
secretario de Educación, Daniel Pano Cruz a las normales públicas
del estado, a esa normal “no le entregaron nada y se supone
que ahí venía inmerso el recurso para el festejo del 78
aniversario”.
|