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Comienzan campaña en Vancouver, Canadá

Temen familiares que el gobierno esté dejando morir a los presos en ayuno

* Cumplió J.S. días en huelha de hambre

 

Karina Contreras * A 30 días de ayuno los cinco presos de Acapulco se encuentran débiles y con claros signos de gastritis, informó la doctora Lucero Jiménez Roldán, quien el viernes con otros médicos revisaron a los presos políticos a solicitud de organizaciones sociales.

La doctora se mostró preocupada por Alvaro García, quien tiene 49 años, del cual dijo que tiene un deterioro físico notable, además de encontrarse muy pálido y está propenso a un infarto.

Dijo que al presidente del Comité de Presos Políticos y de Conciencia del Cereso de Acapulco, Omar Guerrero Solís, tiene problemas urinarios, los cuales pueden ser por la tortura que recibió cuando fue detenido.

Dijo Jiménez Roldán que Guerrero Solís le comentó que en los primeros días orinaba con sangre, por lo que dijo que buscará que en los próximos días los visiten médicos de la Asociación de Médicos Contra la Tortura.

Señaló que los presos políticos se encuentran con dolor de cabeza y de estómago, además de sufrir constantes calambres. Asimismo manifestó que todos ya sufren los síntomas de la gastritis, pero aseguró que todavía toleran los líquidos. Pero mientras pasen más días los daños pueden ser irreversibles, advirtió.

Los cinco presos políticos que se encuentran en ayuno son Alvaro García Avila, Rogelio García Pineda, Pilar Martínez Pérez, Joviel Rafael Ventura y Omar Guerrero Solís, quienes se instalaron en ayuno el 15 de mayo, en solidaridad con J.S., quien tiene más de 60 días en ayuno en demanda de una amnistía general para los presos políticos, además del regreso de Angel Guillerno Martínez, Fernando Gatica Chino y de Felícitas Padilla Nava a los ceresos de Acapulco.

Por otro lado, entrevistada vía telefónica Elizabeth S. informó que J.S. se encuentra débil pero con la firmeza para seguir en la demanda de una ley de amnistía que beneficie a los presos políticos.

Manifestó que su hermano está cumpliendo 61 días de ayuno ante la total indiferencia de las autoridades federales, por lo que pase será responsabilidad del gobierno que encabeza Vicente Fox Quesada.

Elizabeth S. recriminó al gobierno de que diga que en México se respetan los derechos humanos cuando hay una crueldad infinita.

Asimismo informó que G. A. se encuentra estable a 40 días de haber empezado su ayuno.

En una carta dirigida a este medio, la hija y familiares de J.S. y G.A., quienes se encuetran exiliados en Vancouver, Canadá informan que familiares y amigos de los presos políticos en México iniciaron una vigilia por la libertad, que consiste en colocarse afuera de una iglesia para conseguir el apoyo, llevar velas, flores, realizar actividades culturales, periódicos murales y repartir volantes, todo con el objetivo de sensibilizar a la comunidad internacional ante el problema y recolectar sus opiniones, cartas, firmas de apoyo y fondos económicos.

Asimismo informan que en esa ciudad también se exhibieron pinturas de J.S. y G.A., que se encuentran en huelga de hambre, en el penal de máxima seguridad La Palma y Neza-Bordo respectivamente, sin que el gobierno mexicano a los 61 y 40 días del ayuno  respectivamente, de una respuesta. Además de que otros cinco presos en Acapulco cumplen 31 días.

La hija de J.S. y G.A., Leonor Araceli, señaló que la situación de los presos políticos en México conmovió a los ciudadanos canadienses, quienes llegaron a manifestar que no vendarán de vacaciones a México mientras el gobierno de Vicente Fox siga violando los derechos humanos.

Señala también que más de 100 personas firmaron una carta dirigida a Vicente Fox, con copia a Santiago Creel, en la cual se demanda la liberación de todos los presos políticos y el respeto a los derechos humanos en México.

Asimismo señala que los familiares y amigos de los presos políticos en México con sede en Canadá, hacen responsable al gobierno mexicano, encabezado por Vicente Fox, de la integridad física de los siete presos políticos en huelga de hambre, pues temen que los estén dejando morir, ya que el gobierno mexicano no dio respuesta alguna pese a que se había comprometido a hacerlo el jueves pasado.